El papa Francisco recibió en Canadá la bienvenida de los indígenas
«Estoy profundamente dolido»
Miles de indígenas se reúnen en Maskwacis para escuchar una disculpa muy esperada del papa Francisco por generaciones de abuso y represión cultural en las escuelas católicas

El papa Francisco besa la mano de la venerable indígena Alma Desjarlais, sobreviviente a los malos tratos en internados católicos canadienses, a su llegada el domingo 24 de julio de 2022 a Edmonton, Canadá.

Miles de indígenas se reunieron el lunes en Maskwacis, una pequeña comunidad en las praderas de Alberta, para escuchar una disculpa muy esperada del papa Francisco por generaciones de abuso y represión cultural en internados católicos de todo Canadá.
“Llego hasta sus tierras para decirles personalmente que estoy dolido, para implorar a Dios el perdón, la sanación y la reconciliación; para manifestarles mi cercanía, para rezar con ustedes, y por ustedes”, expresó el Sumo Pontífice, quien reconoció que este viaje se trata de “una peregrinación penitencial”.
“Esperaba este momento para estar con ustedes, en este lugar tristemente evocativo”, afirmó ante los fieles.
Francisco tenía programado llegar a media mañana al sitio de la antigua Escuela Residencial India Ermineskin, ahora en gran parte demolida.
Planeaba acudir también a los sitios de la antigua escuela y el cementerio cercano antes de hablar en una gran área abierta ante sobrevivientes de la escuela, sus familiares y otros simpatizantes.
Francisco llegó el domingo a Edmonton, donde fue recibido por representantes de los tres principales grupos indígenas de Canadá —Primeras Naciones, Metis e Inuit— junto con dignatarios políticos y de la Iglesia.
En la ceremonia de bienvenida, Francisco besó la mano de una sobreviviente de la escuela residencial, la venerable indígena Alma Desjarlais de las Primeras Naciones de Frog Lake, un gesto de humildad y respeto que él había hecho antes, cuando se reunió con sobrevivientes del Holocausto.
El papa pasó el resto del domingo descansando en un seminario en Edmonton, la capital de Alberta.