El arzobispo explicó que se organizó «muy rápido» y se disculpó por haber «metido la pata»


El intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Kirchner parece haber dejado atrás las internas y generado un horizonte de unidad en el Frente de Todos, motivo por el que los principales dirigentes del oficialismo, incluido el presidente Alberto Fernández, compartieron este mediodía una misa en la Basílica Nuestra Señora de Luján para repudiar el ataque contra la exmandataria.
Con una fuerte impronta oficialista y sin representantes de la oposición, la Misa por la Paz contó con la presencia del gobernador bonaerense, Axel Kicillof; el jefe de Gabinete, Juan Manzur; los ministros Santiago Cafiero (Relaciones Exteriores), Eduardo de Pedro (Interior), Jorge Taiana (Defensa), Gabriel Katopodis (Obras Públicas), Jorge Ferraresi (Desarrollo Territorial y Hábitat), Juan Zabaleta (Desarrollo Social); además de la hermana de la vicepresidenta, Gisele Fernández.
Axel Kicillof dijo presente y estuvo junto a Gisele, la hermana de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
La ceremonia religiosa, que se realizó en el interior de la Basílica con una concurrencia cercana a las 2000 personas, contó con la presencia del referente de La Cámpora y dirigente bonaerense, Andrés «Cuervo» Larroque; el expresidente Eduardo Duhalde; la titular de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau; la referente de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida; y el premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel.
En el inicio de la misa, en la que agradeció el hecho de que la vicepresidenta haya resultado ilesa en el ataque sufrido el pasado 1 de septiembre, se realizó una oración para pedir por la salud del exsenador de Juntos por el Cambio Esteban Bullrich.
El ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro junto al exmandatario Eduardo Duhalde y la titular de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau. Foto: Rolando Andrade Stracuzzi