
Aileen Cannon, jueza federal de Florida, se negó a retrasar el inicio del caso penal en contra de Donald Trump donde se le acusa por un presunto manejo inadecuado de documentos clasificados.
De esta manera, escribió que la fecha de inicio del juicio podría reconsiderarse en una conferencia de programación el 1 de marzo.
La posición adoptada por Cannon concuerda con la posición del fiscal especial Jack Smith, quien desde un principio se opuso a cualquier retraso en el caso, pues advirtió que el objetivo del exmandatario de la nación consistía en retrasar su juicio hasta después de las elecciones presidenciales de 2024.